INSERCIÓN EN EL CAMPO DE LA ARQUITECTURA


"...me acostumbre a controlarme y a no dibujar mis ideas...prefiero ver como van tomando forma en una maqueta. Eso me permite pensar más...”Cesar Pelli. Arq

La idea arquitectónica, es el elemento estructurante básico de la genealogía de un proyecto. Por este motivo se hace necesario controlar los procesos de “generación formal “y los “sistemas de comunicación “para poder adquirir un concepto claro de la forma, y de este modo, poder construir luego, la forma de esa idea.

La arquitectura sustenta valores espaciales, materiales y comunicacionales, que deben entenderse inseparables, pues cuando la arquitectura adquiere materialidad, se expresa, comunica y puede hacerlo al ir materializándose, construyéndose, modificándose y reconstruyéndose sobre si misma.

La calidad y el carácter del espacio arquitectónico dependen de las superficies que los limitan. El espacio arquitectónico surge de las relaciones entre puntos, líneas, planos y volúmenes. El tema central consiste en “dar forma “a dichos elementos según la pauta de diseño que se persigue.

Se percibe ese espacio, esa idea arquitectónica porque se captan sus superficies y se los comunica representándolos.

INSERCIÓN EN EL CAMPO DE LA REPRESENTACIÓN ARQUITECTÓNICA.

Los argumentos más claros y compartibles sobre la representación arquitectónica la ubican no solamente como “instrumento de reproducción “de una obra de arquitectura, sino como una “forma de pensamiento “de la misma.

Al coincidir con este modo de entender el rol de la representación arquitectónica tanto en la creación como en la reproducción de la obra de arquitectura, nos coloca en una situación comprometida con vistas a complementar su enseñanza – aprendizaje.

El proyecto arquitectónico, (su proceso de formalización) se realiza mediante representaciones arquitectónicas (bidimensionales - dibujos y tridimensionales- maquetas) que implican distintos modos pensar y representar la arquitectura.
En muchas casas de altos estudios, la utilización de técnicas alternativas (maquetas, perspectivas, fotografías) y de hábitos compositivos asociados a ellas es poco frecuente. Nuestra formación nos ha llevado de la mano de un mundo formado por imágenes bidimensionales que relatan espacios tridimensionales y habitualmente nos valemos de ellas para nuestras representaciones durante nuestra formación, e incluso para nuestra actividad profesional.

El dibujo arquitectónico nos transporta necesariamente a 3 dimensiones, vale decir que en él debe leerse la realidad tridimensional en las 2 dimensiones del papel, y al margen de lo rápido que puede ser su ejecución, representan el espacio de manera “abstracta “, lo cual sumado a la necesidad de tener que contar con varios dibujos (plantas, cortes, vistas y perspectivas y su interrelación) para comunicar una obra o idea, hace difícil su comprensión por quienes no dominan este método.

Pero la arquitectura implica colores, texturas, luz, sombra, formas y dimensiones, no es amorfa y la representación tridimensional, “la maqueta arquitectónica “es una de las técnicas que mejor describe esas cualidades.

La maqueta de arquitectura, es una traducción inmediata de las ideas sobre el espacio mediante elementos tectónicos y es en esencia “tridimensional “, pues contiene, expresa y comunica las 3 dimensiones de un fenómeno también tridimensional: el espacio.

La maqueta implica un conjunto sistematizado de técnicas y métodos de trabajo que están sujetos a determinadas leyes o reglas. Posee un rigor geométrico y expresivo propio. Su poder comunicativo se verifica en minutos: el tiempo que se necesita para realizar sobre ella un recorrido visual.
La maqueta “no es un bonsái “ . Un bonsái es un árbol reducido, que es igual a otro árbol pero en pequeño. La maqueta, en cambio, no es igual a la obra construida o proyectada: no tiene cañerías, no tiene cimientos. La maqueta es una conceptualización de la obra actual o futura y por lo tanto debe tener niveles de equivalencia, así como niveles de diferencia que nos ayuden a entender el proyecto en su esencia, a visualizarlo y a incentivar nuestra capacidad creativa. “Debe ser un instrumento de producción tanto como de comunicación “.
Desde el punto de vista del observador, el valor objetual y la posibilidad imaginativa y lúdica que ofrece la maqueta arquitectónica con su reducción de escala junto con la posibilidad de ofrecer puntos de vista irreales y privilegiados son aspectos insustituibles.

Pero en la práctica, la maqueta muy pocas veces es utilizada como instrumento de diseño. Por lo general se usa más el lápiz que la trincheta y salvo algunas excepciones, las ideas suelen registrarse en papel y una vez resuelto el proyecto se confeccionan las maquetas.

Por tal motivo, la estructura del curso apunta básicamente al conocimiento de este sistema de representación como apoyo inicial, básico (y complementario de los otros sistemas de representación) desde los primeros pensamientos arquitectónicos, buscando dar a los alumnos otro elemento necesario tanto para la concepción arquitectónica como para la comunicación de sus ideas proyectuales.
OBJETIVOS GENERALES DEL CURSO
argumentaciones sobre las maquetas

Comprender la naturaleza de esta herramienta de representación del espacio y de los medios con los que es posible actuar sobre este campo para dominar su valor instrumental.

Entender a la maqueta arquitectónica no solo como un método de representación sino como una técnica de diseño que permite elaborar el espacio, la estructura, la geometría, el detalle, los materiales, todo al mismo tiempo y sin distorsión.

Trabajadas casi como estructuras, en distintos materiales y colores, o sugiriendo espacios y volumetrías en distinta escala y grado de definición, reales o abstractas, las maquetas arquitectónicas son un excelente instrumento de diseño y presentación, que tanto profesionales, profesores y estudiantes de arquitectura pueden incorporar como herramienta de trabajo al momento de diseñar.

Entender a las maquetas como recursos que nos permiten ensayar las proporciones y la escala, determinar la distribución esquemática de los volúmenes y examinar las relaciones entre ellos.

Como imagen tridimensional de objetos también tridimensionales, reales o imaginarios, la maqueta arquitectónica es un instrumento de representación que sirve tanto para comunicar, como para verificar o definir una idea. Nos permite “observar un resultado “y exponerlo a críticas y análisis (propias y ajenas) y a partir de ellos, modificarlo.
OBJETIVOS PARTICULARES DEL CURSO.

Se trata en primera instancia de hacer, a través de diferentes experiencias pedagógicas, un recorrido teórico – práctico sobre las nociones y argumentos que dominan el proceso intelectual y constructivo de una maqueta: planificación, construcción y detalles de terminación. La idea es tomar contacto con la técnica (herramientas y materiales) desde el comienzo para conseguir resultados inmediatos, aprendiendo a traducir los dibujos a un modelo tridimensional, requisito indispensable para poder realizar una práctica efectiva.
Ejercitar la manipulación de estos aspectos a través de la práctica concreta mediante trabajos formales, elaborando maquetas que rescaten y expongan las cualidades espaciales esenciales de las obras representadas.

Trabajaremos los conocimientos prácticos: desglosando sus componentes de modo tal que desarrollen paso a paso el procedimiento necesario para lograr un resultado complejo, partiendo de relaciones simples. Obviamente las operaciones que son necesarias para obtener una representación, requieren, se nutren de una definición de cierto grado de síntesis adecuado a determinados fines. Hablamos no solo de operaciones técnicas sino también mentales (como la planificación de una maqueta, la elección de la escala de representación o los materiales de construcción)

Además de aportes teóricos (conceptuales)y trabajos prácticos, el curso contará con el aporte del cuerpo docente a cargo del mismo, en forma de recomendaciones, orientaciones y sugerencias para la construcción de maquetas, extraídas de la propia experiencia laboral.
ESTRUCTURA PRÁCTICA DEL CURSO
METODOLOGÍA DE ENSEÑANZA

“...capturar el espacio tridimensional de una idea arquitectónica representada bidimensionalmente en el papel, en la tridimensión de la maqueta atravesando distintos niveles de complejidad...”

El curso, cuyo material didáctico ha sido elaborado por un equipo con experiencia tanto en el campo docente (FAU-UNLP) como en lo profesional (actividad privada), es básicamente práctico y accesible a diferentes niveles de formación. Solo se requiere saber interpretar plantas, secciones y vistas (sistema de proyecciones ortogonales) y dominar la interrelación de sistemas de representación grafica (sistema monge, perspectivas paralelas y perspectivas cónicas). Se propone como material pedagógico el patrimonio arquitectónico de la vivienda individual, que abarca un amplio repertorio formal, tecnológico e ideológico. Dado el carácter netamente práctico del curso, se requiere también dedicación y un mínimo de tiempo para poder ejercitar y afianzar los distintos sistemas y técnicas de trabajo.

A través del curso se pretende aportar los recursos necesarios para una forma de expresión precisa y tridimensional de la arquitectura: hablamos del dominio de un nuevo lenguaje de representación arquitectónica. No se intenta priorizar ningún modo particular de trabajo, técnica o material. Se aplicarán todos, según las distintas situaciones espaciales, tecnológicas y cromáticas que se presenten, del mismo modo que en el proceso proyectual que se nutre de todas las metodologías al momento de representar una idea arquitectónica.

Se desarrollara recorriendo distintos de niveles de complejidad; desde una gran abstracción volumétrica (aspectos formales, geométricos y disposicionales) hasta decisiones respecto del lenguaje arquitectónico con un alto grado de definición.

PRIMER NIVEL: se apelará a trabajos específicos con volúmenes simples y grillas espaciales que permitan conocer y dominar las técnicas de trabajo (uniones, encastres, calados, medidas) como así también los materiales y herramientas
SEGUNDO NIVEL: se trabajará en base a maquetas rápidas, flexibles, libres, abstractas y sin escala. En esta etapa nos interesa comunicar la esencia de las obras, “la idea arquitectónica “y para ello trabajaremos con todo tipo de materiales y técnicas de construcción.
TERCER NIVEL: la escala de trabajo será 1:100. En esta etapa se intenta hacer legibles no solo las relaciones espaciales sino también los colores, los materiales, los detalles y todas las características de un espacio y de un ambiente determinado, adecuándolo a la escala de trabajo y con materiales específicos.

CUARTO NIVEL: la escala de trabajo será 1:50. Al igual que en el nivel anterior, se dará importancia al nivel de equivalencia en la representación, pero en este caso requerirá un grado de elaboración más complejo acorde a la escala. También aquí se trabajará con materiales específicos.
QUINTO NIVEL: la escala de trabajo será 1: 10, 1: 20. En esta instancia, se pretende desarrollar un sector de la obra arquitectónica, una planta, una vista tridimensional, un despiece, un detalle constructivo, llevando al extremo las posibilidades técnicas de los materiales, la capacidad de trabajo, el dominio instrumental, la expresión arquitectónica de los materiales.
De este modo, al finalizar el curso, cada alumno habrá realizado un camino sencillo y práctico sobre los distintos materiales y herramientas, métodos de trabajo y recursos complementarios, trabajando sobre “una obra de arquitectura” en las escalas más habituales de diseño.

El dialogo y las correcciones (criticas constructivas-metodológicas) durante el trabajo en taller, conducirán a desarrollar en ambos, docentes y alumnos, su propia capacidad creativa.

Así, mediante la practica conciente, habitual e imaginativa que cada alumno haga de la maqueta como instrumento de la arquitectura, conducirá con el tiempo a que cada uno adquiera un modo personal de expresión arquitectónica.

...como lo que me interesa es evocar un lugar, el dibujo siempre me ha dejado tremendamente insatisfecho y, generalmente, prefiero una técnica más realista como la maqueta...




...mi sueño dorado sería que Hollywood me diera acceso a los talleres donde construyen sus cosas...Emilio Ambasz